De Abdul Muhsan Al Abad
Fue relatado también por 'Omar -que Alá se complazca de él- que: “Cierto día, estando en compañía del Mensajero de Alá -la paz y misericordia de Alá sean con él-, se presentó ante nosotros un hombre, con vestiduras de resplandeciente blancura, y cabellos intensamente negros, que no evidenciaba señales de viaje, y que ninguno de nosotros conocía. Se sentó ante el Profeta -la paz y misericordia de Alá sean con él-, y apoyando sus rodillas contra las rodillas (del profeta), y poniendo las manos sobre sus muslos, dijo: "¡Oh Muhammad!, Infórmame acerca del Islam". El Mensajero de Alá -la paz y misericordia de Alá sean con él-, le dijo: El Islam es: que atestigües que nadie tiene el derecho de ser adorado sino Alá (que no existe divinidad sino Alá), y que Muhammad es el Mensajero de Alá; que establezcas el Salát (Oración), pagues el Zakát; ayunes el mes de Ramadán, y peregrines a la Casa Sagrada (Hayy) cuando tengas posibilidades (económicas y físicas) de hacerlo".